A veces tengo la sensación de estar viviendo en el metaverso catalán.
Una realidad virtual, un mundo paralelo, una universo de ficción.
Hoy, por ejemplo, durante la rueda de prensa del gobierno catalán de todos los martes.
Había nada menos que tres atriles.
O sea que comparecían -además de la portavoz, Patrícia Plaja- dos consejeros.
¿A qué se debía semejante despliegue?
Han presentado a bombo y platillo el “despliegue de la atención integrada social y sanitaria”.
La felicidad ha durado poco porque un colega de El Confidencial, Marcos Lamelas, les ha recordado que los mismo ya se presentó hace nada menos que … ¡nueve años!
¡Y hoy volvían a vender la burra!
La cara de los consellers era un poema. Y la de la portavoz; tierra, trágame.
Pero no sólo eso.
Los indepes, en este caso Junts, eran los que criticaban en su día la “gestoría Montilla”.
No voy a salir yo ahora en defensa del tripartito, del cual fui un crítico implacable.
Pero el independentismo ha superado con creces las expectativas.
Mas ya anunció en su día, también en tono grandilocuente, el “govern dels millors”.
Al final se quedó en nada.
Hoy, aparte de esto, los temas estrella de la reunión semanal del Consell Executiu han sido la invasión de Ucrania -como si tuvieran competencias-, las medallas Josep Trueta y un viaje de Pere Aragonès a Dublín para entrevistarse con el Sinn Féin y hablar del gaelico.
Atendiendo que el último viaje oficial fue a la Catalunya Nord vamos mejorando pero tampoco es para tirar cohetes, francamente.
Esto, en la semana que ha habido dos fiestas ilegales en Catalunya, siguen las excarcelaciones de violadores por la Ley Montero -sobre esto tampoco tienen competencias pero para ser un gobierno tan feminista tampoco se quejan- o las reservas de agua, en pleno invierno, están al 28%. O sea que no sé que beberemos en verano.
Eso sí, ellos a lo suyo
La portavoz del gobierno catalán ha dicho que hay una “causa general” contra el independentismo y que si el “estado represor” o las “ganas de venganza” de los jueces.
“Los tribunales españoles continúan con la persecución sistemática contra un grupo de personas muy concretas, que son aquellas personas que defienden que Cataluña debe ser un estado independiente”, ha afirmado textualmente.
No es verdad porque, si fuera así, habría 1,4 millones de indepes en la cárcel, que son los votos que sacaron en las últimas elecciones al Paralment. Incluido ella, por cierto.