Primero los rusos aplastarían a los ucranianos en pocos días. Luego los ucranianos se defienden bien -los USA y UK habían metido armas a mogollón de forma discreta desde2014-.
Las columnas de avance rusas quedan atascadas. El golpe de estado en Kiev no se produce. Las fuerzas armadas y de seguridad ucranianas, depuradas de elementos no patriotas, aguantan. Los rusos diseñan un paseo militar y se acaban encontrando primero con un desastre en el norte -que les obliga a replegarse tras perder demasiados efectivos y material- y con un frente estancando en el este. Pasamos en occidente de decir que los rusos barrerían a que son un ejército de pacotilla.
Anunciamos una y otra vez, ahora, que se quedan sin efectivos, que no tienen municiones, que se quedan sin materiales. Que los medios occidentales (escasos salvo vigilancia electrónica y en municiones de origen soviético, que se están agotando en los países de laOTAN) barrerán a los rusos. Mientras tanto, los rusos avanzan poco a poco y Putin no declara la movilización general, sólo moviliza de forma parcial y encubierta.
Como la expectativa inicial era que sería una victoria de días estos avances actuales parecen poca cosa. Si los rusos no avanzan están acabados, si avanzan no es importante. Me temo que la condena moral a la guerra de agresión rusa no es suficiente para impedir que, poco a poco, sobre un mar de sangre y destrucción, los rusos lleguen a la rivera oriental del Dnieper.
Mientras, en la guerra económica con Rusia lo único cierto es que una autocracia soporta siempre mejor la pérdida de bienestar que nuestras democracias. Una guerra económica que es ignorada por la mayor parte de Iberoamérica, por casi toda África, por todo Oriente Medio y por la mayor parte de Asia. No vamos bien y alguien lo tiene que decir.
Acabo con una pregunta:¿alguna vez se ha podido financiar una guerra convencional proxy y una guerra económica mundial "reduciendo la inflación y aumentando el gasto militar?